Como normal general comprendemos esta etapa del perro desde los 5-6 meses hasta los 2 años de edad aproximadamente (dependiendo del individuo).
Durante esta etapa el perro continúa conociendo su entorno y acumulando experiencias.
¿Qué debemos tener en cuenta durante esta etapa?:
- Se sienten más seguros de sí mismos y tienen mayor condición física.
- No tienen apenas auto-control.
- Se aburren con facilidad. Necesitan que ocurra algo a su alrededor (necesitan acción).
- Encuentran aburrido el entrenamiento-adiestramiento si es largo o no les motiva.
- Tienden a buscar y relacionarse con individuos de su misma especie.
Es por ello que debemos dejar (incluso fomentar) que se relacionen con otros perros. - Precisan de una estimulación adecuada y un mayor ejercicio físico (sobre todo en determinadas razas).
- Aparecen los primeros cambios hormonales y comienza el desarrollo sexual.
Es muy normal que el comportamiento del perro cambie (más actividad, excitación y estrés, más ladridos, menor auto-control, etc…)
Ejemplo: Encontramos cambios de conducta cuando nuestra perrita entra en su primeros celos.
Ejemplo: Encontramos cambios de conducta cuando nuestro perro macho comienza a tener un desarrollo sexual.
Si todo se desarrolla con normalidad, a partir de los 20 meses nuestro perro comenzará a mostrar conductas de perro adulto. Si no permitimos que su etapa adolescente se desarrolle con normalidad, nos encontraremos con perros de hasta 4 o 5 años de edad con comportamientos adolescentes.
¿Qué hacer para que esta etapa de desarrollo del perro joven pase con total normalidad?
- Dejar que nuestro perro se relacione a menudo con otros perros: Necesitan mantener sus relaciones sociales, trabajar su comunicación y aprender de otros perros.
- Permitir que siga conociendo y explorando su entorno: Llevarlo a sitios nuevos, conocer lugares, diferentes personas, ver diferentes estímulos, dejar que olisquee aquello que le interesa, etc…
- Realizar ejercicio físico adecuado: Paseos con correa y sin ella (de forma segura), juego, tiempo libre, etc…
Si no tenemos una llamada fiable podemos emplear correas muy largas (10 metros). - Entrenamiento-Adiestramiento adecuado para conseguir algunos comportamientos de obediencia básica y conseguir estimulación mental y algo de auto-control.
Ejemplo: No tirar de la correa, sentado, echado, llamada, etc… - Trabajar la estimulación mental.
Entrenamiento, juguetes interactivos, trabajo de olfato, etc…
Si necesitamos enseñar algo al animal debemos adaptarnos al perro joven en la medida de lo posible trabajando tiempos cortos de adiestramiento en sesiones atractivas (tampoco debemos exigir demasiado desde un principio).
Si la excitación aumenta considerablemente, será mejor opción abandonar el adiestramiento (al existir demasiado estrés y excitación el aprendizaje y la comunicación se ven comprometidos). Esperamos a que el animal consiga relajarse.
Publicado por: Carlos Martí – informacion@manydogs.es